Principalmente somos afectados, y padres y familiares de afectados por el síndrome. Pero también hay amigos, profesionales de la educación ó la sanidad, y personas anónimas que sin tener a ningún familiar afectado, nos dan su apoyo asociándose.
La unión hace la fuerza, y cuantos más asociados seamos, más cosas podremos hacer por ayudar a las personas afectadas por este síndrome.